¿Un practicante en WallState?

Una experiencia cercana y real sobre lo que significa trabajar en WallState

Para los que no saben, al entrar a Ingeniería Comercial y ver la malla curricular te puedes dar cuenta que es requisito hacer una práctica profesional para poder sacar el título y terminar la universidad.

Para mí siempre fue algo muy lejano… hasta que llegó octubre del 2022 y empezaron las ferias laborales, clases para armar un perfil de LinkedIn, estrategias para enfrentar una entrevista y miles de otras herramientas que la universidad nos estaba entregando, pero que se sentía como un bombardeo de información 😵‍💫.

Aquí fue cuando empezaron las típicas preguntas como “¿En qué te gustaría trabajar?” o “¿En qué área te quieres especializar?”, pero lo único que sabía era que realmente no tenía idea de nada y parecía que tenía que tener todo claro ahora ya.

Así que decidí plantearme qué quería y en dónde me veía. Quería encontrar un lugar en donde hubiera un ambiente con mucha energía, con ideas innovadoras y que tuvieran un propósito con un impacto real en el mundo.

Pero esta empresa ideal no iba a llegar por arte de magia, necesitaba empezar a moverme así que decidí crear un plan y aquí les voy a contar mi experiencia.

Paso 1: Formar contactos

Siempre había tenido el ojo puesto en las startups de Platanus Ventures, desde un inicio sentía que eran proyectos interesantes y con soluciones innovadoras que revolucionan el mercado. Así que mi primera acción fue ver las startups que ya conocía y buscar a sus diferentes founders.

Así fue como llegué a Mauricio, nuestro CTO. Le envié una solicitud de amistad por LinkedIn con la esperanza de que me aceptara, lo cual milagrosamente ocurrió y decidí enviarle un mensaje presentándome y tanteando el terreno.

Paso 2: La entrevista 😰

Luego de haber hecho el primer contacto con WallState, me invitaron a la oficina para conversar sobre mi práctica. Obviamente no la pensé dos veces y les confirmé que iría.

Así que ese jueves 2 de noviembre partí desde la universidad. Me presentaron la oficina y las otras startups que trabajan junto a ellos. Nos sentamos en el patio a conversar de WallState y, también, sobre mi recorrido en la carrera y otros aspectos personales para conocerme.

Luego de conversar un poco más, nos despedimos y volví a mi casa extasiado de lo que había visto y esperando que ellos también hubieran tenido una buena impresión.

Paso 3: La espera y la respuesta

Quedamos en hablar a mediados de ese mes por lo que durante ese tiempo seguí con mi vida. Además, mi familia ya empezaba a estar impaciente y luego de contarles sobre WallState nacían los siguientes comentarios “ay pero Iñaki postula a una empresa grande”, “quién te puede asegurar que sean confiables” y otros más que nacían del amor, pero que eran preocupaciones que no compartía.

Hasta que el 15 de noviembre me llega un mail. Iba saliendo del campus San Joaquín con unos amigos así que nos paramos a leerlo y, cuando vimos “queremos que te sumes al equipo”, no pudimos evitar pasar al Fito a tomarnos unas cervezas para celebrar.

Paso 4 y más importante: Empezar la práctica

Así fue, llegué el 3 de enero a las oficinas listo para empezar, conocí al equipo y me enseñaron el detrás de cámara. Volví a mi casa agotado, mi cabeza estaba burbujeando de información que nunca antes había conocido.

Con el pasar de los días pude ir dándole forma a los tecnicismos y la manera de trabajar del equipo, pude ir familiarizándome con la oficina y, en especial, con la sagrada máquina de cafés que de seguro a muchos nos ha salvado en más de una ocasión.

Y me puse a trabajar. Me ofrecieron guiarme por el área que más quisiera y decidí empezar viendo marketing. Después de días de mucha búsqueda, llegaba con miles de ideas para, finalmente, ver que ya las habían intentado o que ya estaban en progreso, lo cual me daba indicios de que iba por un buen camino.

Hasta que me dieron mi primera luz verde, hacer un estudio etnográfico, y me puse manos a la obra. Tenía que formar un perfil de cliente, contactarlos, agendar reuniones y elaborar una guía de conversación. Parecía una montaña de tareas, pero nos permitió tener la oportunidad de conversar con nuestros usuarios, conocer sus inquietudes y hasta el día de hoy hemos podido seguir en contacto.

Luego de haber completado el estudio, mi siguiente monte Everest fue hacerme cargo de Google Ads, una batalla que ya habían intentado dar y que estaban dispuestos a hacerla nuevamente conmigo al mando.

Mientras Google Ads hacía su magia, pasé a la tarea de redactar mi primer blog. Cuando me lo plantearon lo encontré interesante así que me puse a escribir y ese 1 de febrero se publicó. Los primeros minutos fueron de pura ansiedad, me sentía como un padre primerizo, pero con el pasar de los días comprobamos que fue el día con peak de registros en la plataforma 🎉

En este tiempo hemos podido elaborar informes de hallazgos, reuniones en colaboración con otras startups, encontrar maneras innovadoras de dar solución a problemas que iban surgiendo y trabajar de manera interdisciplinaria para llegar a mejores resultados. 

¿Qué quiero decir con todo esto?

Llegar a una primera pega es difícil, todos lo sabemos, pero con un buen equipo detrás que te está ayudando todo resulta más fácil y ameno. Estos meses han sido de mucho aprendizaje y he podido ver todo el trabajo que hay detrás para poder entregar la mejor experiencia a los usuarios de WallState.

Uno de nuestros pilares es poder formar una comunidad que fomente el aprendizaje y poder escuchar a nuestros usuarios ha sido un gran fruto que recojo de toda esta experiencia.

Todos podemos llegar con dudas de ¿Cómo funciona?, ¿Cómo saber si es confiable?, ¿Qué hay que hacer?, etc. Son naturales, es un mecanismo de defensa ante lo desconocido y es nuestro trabajo como equipo entregarles todas las respuestas para que puedan confiar y empezar a vivir esta aventura junto a nosotros.

¡Este 2023 se viene con todo y es por eso que te invitamos a que lo vivas junto a nosotros!